Nutrición del Adulto Mayor
La alimentación saludable es una de las claves para una buena salud a cualquier edad incluidas las personas de la tercera edad.
La nutrición adecuada ayuda a mantener bajo control un importante factor de riesgo para la obesidad, la diabetes mellitus tipo 2, varios tipos de cáncer, la osteoporosis, la hipertensión arterial, la elevación de las grasas sanguíneas, las afecciones del corazón y las cerebrovasculares y otras enfermedades crónicas.
También es un elemento evidente para evitar los estados depresivos y para mantener la agilidad mental.
Los alimentos aportan la energía y los nutrientes necesarios para mantenerse sano, incluyendo las proteínas, las grasas, los carbohidratos, las vitaminas, los minerales, la fibra vegetal y el agua.
Cuando la edad aumenta el organismo puede necesitar ingerir menos energía por disminución de la actividad física, bien sea por falta de motivación o por problemas de salud, pero si se precisa consumir la misma cantidad de los nutrientes contenidos en los alimentos. En la tercera edad pueden aumentar las necesidades de vitamina B12, E, B6, D y ácido fólico y de minerales como el calcio y el zinc.
Una vez identificados los problemas nutricionales en este grupo de edad se hace necesario diseñar una estrategia para combatirlos.
Por este motivo se han recomendado varios aspectos a tener en cuenta como son los servicios sociales, la conservación de la dentadura con visitas frecuentes a las consultas de estomatología o el empleo de prótesis dentales apropiadas, incorporación a la vida diaria de ejercicios mentales como ayuda a mantener alerta el estado de conciencia, conocer la acción de los medicamentos utilizados por esa persona e instruirlo en las virtudes de los alimentos más necesarios.
La alimentación debe contener los requerimientos calóricos necesarios, ser adecuado en proteínas y carbohidratos complejos como los presentes en las frutas y los vegetales, alta en vitaminas, minerales y fibra dietética y baja en carbohidratos simples y en grasas especialmente las llamadas saturadas y trans.
Una alimentación bien planificada en la tercera edad contribuye a mantener un buen estado de salud y a vivir con felicidad muchos años llenos de vigor y energía.
Link: http://www.nnc.cubaweb.cu/MARZO%202012/nac-3-25-3-12.htm
Link: http://www.alimentosysalud.cl/index.php?option=com_content&view=article&id=19&Itemid=106
¿CÓMO ES EL APETITO EN LOS ADULTOS MAYORES?
En esta etapa, el apetito, así como la cantidad de alimentos ingeridos tiende a declinar, por lo que debe tenerse especial cuidado de entregar una dieta balanceada y atractiva que aporte una nutrición equilibrada y saludable. Cuando los adultos mayores incorporan dietas saludables pueden revertirse o retrasarse muchos de los cambios asociados al proceso de envejecimiento, asegurando de este modo, que muchos de ellos puedan continuar viviendo en forma independiente y disfrutando de una buena calidad de vida, que les permita compartir activamente dentro de la familia y de la comunidad.
¿CUÁNTAS VECES DEBEN COMER DIARIAMENTE?
En lo posible deben comer cuatro veces al día: desayuno, almuerzo, once y cena y una colación a media mañana. Las personas mayores suelen no comer en la noche, sin embargo, es importante mantener siempre una comida liviana al atardecer que evitará un largo período de ayuno y mejorará una serie de funciones metabólicas en el organismo.
¿QUÉ CAMBIOS CORPORALES SE PRODUCEN A ESTA EDAD?
El proceso de envejecimiento se suele acompañar de una reducción significativa de la actividad física que contribuye aún más a la pérdida de la masa muscular. Por ello, es muy importante que los adultos mayores aumenten su actividad física. Esta tiene innumerables beneficios tales como aumentar el apetito y por ello la ingesta de alimentos. Este cambio se traducirá en una mayor ingesta nutrientes, como proteínas, carbohidratos, vitaminas, minerales y otros componentes saludables presentes en los alimentos, especialmente en frutas, verduras y leguminosas, que beneficiarán su estado de salud. Es importante el estímulo de la familia para el desarrollo de actividades deportivas y recreativas, así como para una mayor ingesta de alimentos. Debe tenerse presente, que el menor consumo de alimentos en los ancianos, se debe a la menor capacidad para detectar el sabor y el olor de los alimentos.
¿QUÉ TIPO DE ALIMENTOS SE DEBE CONSUMIR?
El consumo de productos lácteos descremados como leches o yogurt es importante, ya que si bien la absorción de calcio está disminuida a esta edad, una mayor ingesta diaria significará una mayor ingesta absoluta de calcio. Los productos sin lactosa (deslactosados) presentes en los supermercados son una buena alternativa para los que presenten molestias digestivas producidos por la lactosa como flatulencia y malestares. Un aporte adecuado de lácteos es también una buena fuente de proteínas que contribuirá a evitar la pérdida de masa muscular.
¿CUÁNTO LÍQUIDO DEBEN TOMAR?
Las personas mayores son más vulnerables a la deshidratación como resultado de una disminución de la función del riñón y porque tienen un menor contenido de agua corporal. Debe recomendarse que se consuma bastante líquido, al menos que esté contraindicado por problemas renales o cardíacos.
La alimentación saludable es una de las claves para una buena salud a cualquier edad incluidas las personas de la tercera edad.
La nutrición adecuada ayuda a mantener bajo control un importante factor de riesgo para la obesidad, la diabetes mellitus tipo 2, varios tipos de cáncer, la osteoporosis, la hipertensión arterial, la elevación de las grasas sanguíneas, las afecciones del corazón y las cerebrovasculares y otras enfermedades crónicas.
También es un elemento evidente para evitar los estados depresivos y para mantener la agilidad mental.
Los alimentos aportan la energía y los nutrientes necesarios para mantenerse sano, incluyendo las proteínas, las grasas, los carbohidratos, las vitaminas, los minerales, la fibra vegetal y el agua.
Cuando la edad aumenta el organismo puede necesitar ingerir menos energía por disminución de la actividad física, bien sea por falta de motivación o por problemas de salud, pero si se precisa consumir la misma cantidad de los nutrientes contenidos en los alimentos. En la tercera edad pueden aumentar las necesidades de vitamina B12, E, B6, D y ácido fólico y de minerales como el calcio y el zinc.
Una vez identificados los problemas nutricionales en este grupo de edad se hace necesario diseñar una estrategia para combatirlos.
Por este motivo se han recomendado varios aspectos a tener en cuenta como son los servicios sociales, la conservación de la dentadura con visitas frecuentes a las consultas de estomatología o el empleo de prótesis dentales apropiadas, incorporación a la vida diaria de ejercicios mentales como ayuda a mantener alerta el estado de conciencia, conocer la acción de los medicamentos utilizados por esa persona e instruirlo en las virtudes de los alimentos más necesarios.
La alimentación debe contener los requerimientos calóricos necesarios, ser adecuado en proteínas y carbohidratos complejos como los presentes en las frutas y los vegetales, alta en vitaminas, minerales y fibra dietética y baja en carbohidratos simples y en grasas especialmente las llamadas saturadas y trans.
Una alimentación bien planificada en la tercera edad contribuye a mantener un buen estado de salud y a vivir con felicidad muchos años llenos de vigor y energía.
Link: http://www.nnc.cubaweb.cu/MARZO%202012/nac-3-25-3-12.htm
Link: http://www.alimentosysalud.cl/index.php?option=com_content&view=article&id=19&Itemid=106
¿CÓMO ES EL APETITO EN LOS ADULTOS MAYORES?
En esta etapa, el apetito, así como la cantidad de alimentos ingeridos tiende a declinar, por lo que debe tenerse especial cuidado de entregar una dieta balanceada y atractiva que aporte una nutrición equilibrada y saludable. Cuando los adultos mayores incorporan dietas saludables pueden revertirse o retrasarse muchos de los cambios asociados al proceso de envejecimiento, asegurando de este modo, que muchos de ellos puedan continuar viviendo en forma independiente y disfrutando de una buena calidad de vida, que les permita compartir activamente dentro de la familia y de la comunidad.
¿CUÁNTAS VECES DEBEN COMER DIARIAMENTE?
En lo posible deben comer cuatro veces al día: desayuno, almuerzo, once y cena y una colación a media mañana. Las personas mayores suelen no comer en la noche, sin embargo, es importante mantener siempre una comida liviana al atardecer que evitará un largo período de ayuno y mejorará una serie de funciones metabólicas en el organismo.
¿QUÉ CAMBIOS CORPORALES SE PRODUCEN A ESTA EDAD?
El proceso de envejecimiento se suele acompañar de una reducción significativa de la actividad física que contribuye aún más a la pérdida de la masa muscular. Por ello, es muy importante que los adultos mayores aumenten su actividad física. Esta tiene innumerables beneficios tales como aumentar el apetito y por ello la ingesta de alimentos. Este cambio se traducirá en una mayor ingesta nutrientes, como proteínas, carbohidratos, vitaminas, minerales y otros componentes saludables presentes en los alimentos, especialmente en frutas, verduras y leguminosas, que beneficiarán su estado de salud. Es importante el estímulo de la familia para el desarrollo de actividades deportivas y recreativas, así como para una mayor ingesta de alimentos. Debe tenerse presente, que el menor consumo de alimentos en los ancianos, se debe a la menor capacidad para detectar el sabor y el olor de los alimentos.
¿QUÉ TIPO DE ALIMENTOS SE DEBE CONSUMIR?
El consumo de productos lácteos descremados como leches o yogurt es importante, ya que si bien la absorción de calcio está disminuida a esta edad, una mayor ingesta diaria significará una mayor ingesta absoluta de calcio. Los productos sin lactosa (deslactosados) presentes en los supermercados son una buena alternativa para los que presenten molestias digestivas producidos por la lactosa como flatulencia y malestares. Un aporte adecuado de lácteos es también una buena fuente de proteínas que contribuirá a evitar la pérdida de masa muscular.
¿CUÁNTO LÍQUIDO DEBEN TOMAR?
Las personas mayores son más vulnerables a la deshidratación como resultado de una disminución de la función del riñón y porque tienen un menor contenido de agua corporal. Debe recomendarse que se consuma bastante líquido, al menos que esté contraindicado por problemas renales o cardíacos.
Link: http://www.nnc.cubaweb.cu/MARZO%202012/nac-3-25-3-12.htm
En un adulto mayor suele darse el
estrés, para el manejo de este se han dado las siguientes recomendaciones:
Mantenga su nivel de glucosa
estable. Una consideracion dietética importante es evitar las variaciones en la
glucemia. Para ello, no deben faltar de la alimentacion diaria alimentos ricos
en hidratos de carbono complejos tales como : pan, arroz y otros cereales,
pasta, legumbres. Distruibuya la alimentacion en varias tomas. Tome alimentos
ricos en triptofano. La producción cerebral de serotomina, uno de los
mensajeros alegres, es muy sensible a la dieta. Las fuentes dietéticas más
importantes son: carnes rojas, pescados, leche y derivados, huevos, nueces,
almendras, plátanos y lechuga. Incluya diariamente al menos una ensalada al día
y dos frutas frescas. Estos alimentos constituyen las principales fuentes de
vitamina c.
Todos los seres humanos necesitamos vivir en relación con otros, compartir experiencias, dar testimonio de lo que ha sido nuestra historia porque a través del relato, de la comunicación verbal y corporal con otros, hacemos de nuestras vidas algo significativo que le da sentido a nuestros actos. Nos realizamos como seres humanos.
La experiencia demuestra que el adulto mayor necesita renovar y redescubrir esos sentidos que le aportarán nuevas herramientas a esta etapa de su vida. Envejecer no es sinónimo de enfermar. Madurar, haber vivido, es ser portador de una historia de experiencias personales que dignifican y engrandecen la vida humana.
Es muy importante mantener activos el pensamiento, la reflexión, la conversación y la conciencia y aceptar el propio cuerpo. Es necesario, además, brindarle al cuerpo y a la mente ciertos cuidados especiales que aporten un mejoramiento de la calidad de vida.
La enfermedad y las emociones también se hallan en íntima relación con la conservación de una buena salud mental. Las ansiedades y angustias son los causantes de muchas dolencias que, sumadas a algunas complicaciones médicas, pueden causar un deterioro de las capacidades cognitivas, relacionales y emocionales.
El trabajo con adultos mayores en equipos multidisciplinarios con un sistema de talleres recreativos terapéuticos ayuda al mejoramiento integral de la calidad de vida, brindando atención para el cuerpo, la mente y el espíritu.
Publicado por: Jhonson Delgado Brenes
Jonathan Blanco Leiva
Jeison Madrigal Piedra
Andrey Zuñiga Torres
Cristian Mora Ugalde
Fecha: 24/04/2012